Hoy en día, es habitual ver a personas en la calle, el autobús o el tren leyendo en sus móviles con la cabeza inclinada hacia abajo. Esta escena cotidiana, aparentemente inofensiva, esconde un problema serio: la postura cervical incorrecta.
Esta mala postura, repetida día tras día, puede causar un gran impacto en la salud de tu columna cervical. Al mantener la cabeza en flexión prolongada, se genera una presión excesiva sobre los discos cervicales. Con el paso del tiempo, esto puede provocar dolores, rigidez, rectificación cervical, e incluso patologías degenerativas como hernias discales o artrosis.
¿Por qué es tan perjudicial esta postura?
Adoptar de forma constante una postura cervical incorrecta hace que la columna se adapte de forma forzada. Esta adaptación estructural, lejos de ser funcional, puede volverse irreversible si no se corrige a tiempo. A medida que los años pasan, la rigidez aumenta, el rango de movimiento disminuye y el dolor puede volverse crónico.
Pequeños ajustes que previenen grandes problemas
La solución está en la prevención. No se trata de dejar de usar el móvil o leer, sino de hacerlo de manera consciente. Eleva el dispositivo a la altura de los ojos, mantén los hombros relajados y la espalda recta. Estas correcciones simples pueden protegerte de futuras lesiones.
Si notas molestias frecuentes en el cuello, hormigueo en los brazos o rigidez al mover la cabeza, no lo dejes pasar. Solicita tu cita, una evaluación temprana puede evitar complicaciones mayores. Aprende a corregir tu postura y cuida de tu columna hoy para moverte con libertad mañana.
